Desdeño las romanzas de los tenores huecos

y el coro de los grillos que cantan a la luna.

A distinguir me paro las voces de los ecos,

y escucho solamente, entre las voces, una.

(Antonio Machado)

jueves, 30 de agosto de 2012


Hace tiempo que le resbalan las lágrimas, esas que nadie ve, las que te tragas en los momentos arduos, las que enjuagar no puedes, las que no puedes gritarlas, ni acariciarlas, ni saborearlas.
Sólo los dueños lo saben, escondiendo, enmascarándolo, desatando fuego eterno, mientras, la niña calla, espera lo inesperado, busca lo perdido...
Las tinieblas le encubrieron el alma. Oye voces, gritos y tal vez algún requiebro; ¿de dónde vienen? que de tan engalanadas no se perciben.
La vida sigue y sigue sin darse cuenta, y un día y otro. ¡A quién le importa su sufrimiento!
Fueron sus palabras, que lentamente entraron por los poros de su piel, o acaso fue el manantial que yacía vacío y hoy, alborotado, recorre su cuerpo...fue un atisbo de esperanza.
Dejarla así... no la despiertes, que ría dormida y llore despierta. ¡Dejarla así que viva el momento!
Oigo los gritos sin sonido
los lamentos perdidos
los sentimientos ahogados.

Vivo atrapando susurros
absorbiendo emociones
de sueños perdidos.

1 comentario:

  1. Sigue teniendo un lapiz siempre a mano,
    expresa negro sobre blanco tus sensaciones
    mantén vivo el pensamiento sano
    ocupa tu tiempo escribiendo tus emociones...

    Felicidades!
    Pedro Milla

    ResponderEliminar